August 4, 2013November 15, 2014 EDUCACIÓN ELEMENTAL El mundo nuevo, el renovado, si tiene que existir, no conocerá más que la escuela elemental para las masas y la universidad para los individuos, se habrá librado de un agarrotamiento de siglos” Thomas Bernhard. El origen “You don’t need a weatherman To know which way the wind blows” Bob Dylan. Subterranean homesick blues Es necesario hacer una revision de la idea de educación que cada vez está más alejada de planteamientos humanistas y dirigida hacia una especializacion enfermiza. Estados Unidos representa una paradoja al respecto pues es paradigma de la especialización pero también del conocimiento pragmático que nos acerca a lo elemental de la experiencia. Es el periodo de la educación secundaria, ese “en medio” que conforman todos esos años de instituto dedicados al arte de perder el tiempo de la forma mas ruidosa posible los que me preocupan. Porque como dice Bernhard parten de un modelo que embrutece y corrompe, y a lo que yo añado que fuerza la mezcla imposible, emparedada, de pubertad y desidia que sobreexcita los jóvenes y exaspera al profesorado. Tiene que haber otro modelo posible. Es momento de plantearlo, especialmente ahora que los presupuestos no dan casi para mantener la maquinaria de un sistema que solo sirve como prueba fatal de resistencia de la salud psicológica de los jóvenes y de su red/colchón familiar ante una sociedad con funciones muy poco definidas y sin dirección. Tal vez haya que reconsiderar el humanismo, actualizar sus valores, rescatar el modelo multidisciplinar de los hombres y las mujeres del Renacimiento. Volver al hombre y su potencial, volver a la tierra y lo que nos hace parte de ella. Dotar de valor a la experiencia independientemente de que función vayamos a desempeñar y sobre todo definir el tipo de sociedad que queremos, una que construye o una cada vez mas corrupta y antinatural. Cultura educaciónespecializaciónsociedad